Pese a las críticas por no cumplir las expectativas de quienes esperaban una Villa Iluminada como en años anterior, el evento que este 2021 oferta Atlixco no le debe nada a nadie.
La supuesta falta de luces y enormes figuras con focos de colores tiene una razón de ser: evitar aglomeraciones.
Fácil es la queja cuando se piensa en que la entidad está en verde en el semáforo epidemiológico y que el Covid-19 está contenido; sin embargo, hay que recordar que está pronosticada la cuarta oleada del virus para este invierno.
La necesidad de la reactivación económica era inminente y ha dado buenos resultados; no sólo eso, el ánimo en los poblanos y quienes visitan la entidad se ha elevado. Huele a Navidad de nuevo, pero con el cubrebocas puesto.
La tarde de ayer, la regidora de Turismo, Valeria Bartsch, explicó claramente que se pensó en un nuevo concepto de la Villa Iluminada, algo que se adaptara a la necesidad de todos: atlixquenses enfocados en la vendimia para recuperar la economía local, evitar aglomeraciones con las selfies y fotos grupales en grandes imágenes iluminadas para evitar contagios de Covid-19, además de agregar varios puntos para recorrer en la ruta iluminada sin costo.
Junto con la Feria de la Nochebuena, Atlixco espera recibir más de un millón de turistas y recaudar 300 millones de pesos, pero no sólo eso, que quienes acudan puedan sentirse seguros con protocolos sanitarios para regresar a casa con la certeza de que durante el recorrido de 2.5 kilómetros de ruta iluminada no existió aglomeración y, por ello, riesgo de contagio.
Como turistas toca en esta ocasión no vivir del pasado, la pandemia vino a cambiar todo aquello que conocíamos (como lo conocíamos) y nos plantea retos de adaptación para mantenernos.
Somos de los privilegiados que podrán asistir a la Villa Iluminada y demás atractivos navideños en la entidad, porque muchos otros tristemente fueron víctimas del Covid-19.